Recordando la vida de Paul David Rea y cómo podemos ayudar a las familias impactadas por la violencia del alguacil de Los Ángeles.

Paul Rea's family. Photo courtesy of Julie Martinez

Paul David Rea, dieciocho años, tenía toda su vida por delante. A Paul le gustaba bromear con su familia, bailar, hacer videos cómicos con sus amigos, y era todo un aventurero. Paul estaba lleno de vida y no se tomaba un día por hecho. Si le preguntas a su abuela, Julie Martinez, cómo era Paul, te diría que era un hombre de familia y siempre estaba disponible para ayudar a sus amigos y a la gente que más amaba.   

Trágicamente, su vida fue robada el 27 de junio del 2019, cuando Hector Saavedra, un agente del alguacil de la estación del este de Los Ángeles, le disparó varias veces. La vida de Paul fue robada instantáneamente. Paul simplemente era pasajero en un automóvil cuando su amigo y él fueron detenidos durante una parada de tráfico de rutina.  

Su abuela Julie dice que Paul fue víctima de la violencia del alguacil del condado de Los Ángeles, (LASD, por sus siglas en inglés). “Mi nieto, Paul, fue asesinado a tiros por un miembro de la pandilla llamada Banditos. Esta pandilla opera dentro del departamento del alguacil del condado de Los Ángeles, específicamente en la estación del este de Los Ángeles. Mi nieto sólo tenía dieciocho años. Lo detuvieron y mataron en la calle en donde creció,” se lamenta Julie. 

La familia de Julie ha vivido en el este de Los Ángeles por generaciones, y según Julie, los niños y jóvenes de su familia y comunidad frecuentemente han sido acosados por LASD. Los alguaciles tienen una reputación terrible por su brutalidad por lo cual motiva a Julie a tomar acción y luchar por la justicia. Julie siempre ha sido defensora de los derechos humanos – especialmente para los inmigrantes – pero cuando le tocó ser defensora de la justicia para su nieto, no sabía que iba a ser tan difícil.  

La familia de Julie buscó respuestas con la Junta de Supervisores del Condado de Los Ángeles (BOS, por sus siglas en inglés). Ellos les preguntaron cómo pudo pasar ésto y cómo los alguaciles podían acabar con una vida sin provocación. No encontraron respuestas ni la atención de legisladores. Para encontrar respuestas, Julie sabía que tenían que unirse con organizaciones como ACLU del sur de California, Check The Sheriff, Black Lives Matter de Los Ángeles, National Lawyers Guild de Los Ángeles, y el Centro CSO en el este de Los Ángeles. Como también era importante contar la historia de Paul en las redes sociales, la familia comenzó una cuenta de Instagram llamada @Justice4PaulRea. Al ser parte de estas organizaciones, Julie aprendió que LASD aterroriza a las comunidades, no solo en el este de Los Ángeles, sino también en todo el condado de Los Ángeles, especialmente en comunidades de color. 

“Esto es injusto. Nuestra familia quiere saber, ¿por qué la policía tiene el derecho de quitar la vida de una persona inocente como Paul? Paul fue disparado varias veces y no recibió ayuda médica en tiempo,” dice Julie. 

Julie y su familia ahora asisten a todas las reuniones de la Comisión de Supervisión Civil del Condado de Los Ángeles, y protestas en frente de la oficina del alguacil. Tal como la familia de Paul, hay muchas otras familias demandando justicia para sus seres queridos que perdieron sus vidas a manos del departamento del alguacil. Algunos de ellos son David Ordaz Jr. (1986-2021), Andres Guardado (2001-2020), Dijon Kizzee (1991-2020), Ryan Twyman (1995-2019), y Anthony Vargas (1997-2018).  

Hablar en público en contra del alguacil ha puesto a la familia de Julie en una posición vulnerable. La familia de Paul ha visto autos de LASD conduciendo lentamente en frente de su casa, siguiéndolos en la comunidad, y hasta dañar los sitios conmemorativos de Paul. En otros casos, los agentes han arrestado y detenido a la hermana de Paul, Jaylene, sin causa probable y acosando a la menor Janae después de la escuela.  

Julie y la coalición de Check the Sheriff, de la cual ACLU SoCal es miembra, están trabajando en una enmienda del estatuto del condado para crear finalmente un sistema de controles y equilibrios sobre el Alguacil de Los Ángeles. Villanueva no es el primer alguacil que abusa de su poder; y tampoco sería el último — a menos de que podamos establecer una supervisión civil más fuerte sobre la oficina paramilitar del alguacil. Esta enmienda permitiría que la Junta de Supervisores destituya al alguacil por violaciones graves de la confianza pública, reforzaría la autoridad de la Junta para guiar la elaboración de políticas del departamento del alguacil y crearía una supervisión civil independiente.  

Julie dice, “Desde que participé activamente en organizaciones como Check the Sheriff, he sido testigo de cambios positivos. Si tú o tu familia han sido afectadas por la violencia del alguacil, mi mensaje es que no están solos.”  

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